
Durante esta jornada, el mercado financiero mexicano registró una baja significativa en el precio del oro, que alcanzó su nivel más bajo en tres semanas. Analistas señalan que este descenso se debe al optimismo generado por los recientes avances en las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China, lo que redujo la demanda global de metales preciosos como refugio financiero.
El precio del oro al contado cayó alrededor de 0.4 %, mientras los futuros en mercados internacionales retrocedieron casi 1 %. Este comportamiento impactó directamente a inversionistas mexicanos, así como a empresas dedicadas a la exportación y refinación del metal. En contraste, el peso mexicano mostró una leve recuperación frente al dólar, impulsado por la estabilidad económica y la confianza en el Banco de México.
A nivel nacional, el sector minero analiza los posibles efectos de esta tendencia en los estados productores de oro, como Sonora, Zacatecas y Durango, donde la actividad minera representa un importante motor económico.
Los expertos advierten que el mercado podría estabilizarse en los próximos días, dependiendo del rumbo de las políticas monetarias internacionales y de la respuesta de los bancos centrales ante la inflación. Mientras tanto, los inversionistas mantienen cautela, esperando nuevas señales sobre el comportamiento de los mercados globales. Esta jornada marca un nuevo capítulo en la volatilidad económica que ha caracterizado el cierre de octubre en México y el mundo.




