
Este 15 de septiembre, el peso mexicano se apreció por séptima jornada consecutiva, cotizando cerca de los 18.35 pesos por dólar, alcanzando niveles que no se veían desde julio de 2024. Este repunte se atribuye a crecientes expectativas de que la Reserva Federal de EE.UU. reducirá sus tasas de interés, especialmente después de reportes recientes que mostraron debilidad en los sectores manufacturero y laboral, además de que la inflación en ese país sigue siendo más alta de lo previsto. En ese contexto, la Bolsa Mexicana de Valores vivió una jornada histórica al romper la marca de 62,000 puntos, cerrando aproximadamente en 61,877.36 unidades. Empresas como Wal-Mart de México e Industrias Peñoles registraron subidas destacadas, impulsando los índices. Este desempeño bursátil refleja optimismo inversor tanto local como extranjero, ante la posibilidad de un entorno monetario global más flexible. Sin embargo, analistas advierten que la estabilidad futura dependerá de factores como los datos macroeconómicos de EE.UU., movimientos de la política monetaria global, así como de eventos internos como la aprobación del presupuesto 2026 y condiciones políticas domésticas.